Sesiones Dobles (I.b): El Séptimo Sello

the_seventh_seal.jpg

«Metrópolis«, «Ciudadano Kane«, «Casablanca«, «Los Siete Samurais» y «El Séptimo Sello«. Estas cinco películas podrían conformar el perfecto pack de DVDs «Enteradillo Cinematográfico». Da igual lo poco que uno sepa de cine, ver estos films supone para el ciudadano medio la posibilidad de fardar acerca de su cinefilia (de escaparate) en cualquier cena o tertulia que se precie. Calidad cinematográfica aparte, cada una de estas películas gozan de fama popular debido a los atributos que generan en el espectador: con «Metrópolis» uno puede decir que le gusta el expresionismo alemán, «Los Siete Samurais» aportan exotismo oriental (y Kurosawa)…. La que nos ocupa, «El Séptimo Sello», goza de un halo de «sesudez» y de transcendencia ideal para el enteradillo medio.

Precisamente, esa tendencia a lo transcendental y lo metafísico ha perjudicado a esta película con el paso de los años. El «problema» de Dios y su silencio pudo tener su importancia hace décadas, pero basta mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta que, hoy en día, a nadie le quita el sueño ese tema. Más bien, el film está lleno de los chascarrillos típicos que salen de la boca de todo «procaz» tertuliano que quiere dar a conocer su flamante ateismo al resto de sus acompañantes (si son creyentes, mejor que mejor).

Puede parecer que estoy poniendo muy a parir este mítico film. Nada más lejos de la realidad. Servidor cree que el concepto de «Universalidad» está bastante sobrevalorado, me encantan las películas que tocan temas de interés para la época que están hechas. «South Park«, la serie más cabal y lúcida (no bromeo), además de divertida de las que se emiten en la actualidad, llena sus argumentos con Nintendos Wii, cambio climático, células madre, referencias a películas recientes… No sé como resistirá el paso del tiempo, pero en su (nuestro) contexto es una serie suprema. Probablemente lo mismo le ocurre a «El Séptimo Sello», pero desgraciadamente para mi, no estoy en el momento y lugar adecuados para valorarla en su justa medida.

De todas maneras hay una secuencia del film que creo nos llegará a todos al alma: La merienda campestre entre amigos, tremendamente emotiva, que nos recuerda que eso que llaman felicidad está en las pequeñas cosas a las que tan poca importancia se les da en nuestros días.

Participamos en Sesiones Dobles:

Books & Films, El diario de Mr. MacGuffin, Sesión doble, Fabrica de ilusiones, El espejo de los sueños, Arte y literatura, La mujer justa, Ojo de buey, Himnem, El lamento de Portnoy, Otros clásicos, La linterna mágica, Mitte, El dia del cazador, Marcovelez.net, Corten!!!, Rulemanes para Telémaco, Cinefilo-Compulsivo, Intramuros, Arricom.