Década 0, Cara B (VI): Blood,Looms and Blooms

Blood, Looms and Blooms

Musicalmente hablando, uno de los grandes acontecimientos del año 2008 fue el llamado “retorno del trip-hop”. Lo pongo así, entre comillas, porque realmente ese titular era sostenido únicamente por tres lanzamientos ofrecidos por destacadas figuras “del ramo” que llevaban como mínimo un lustro en sequía discográfica.

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El más sonado, sin duda, fue el regreso de Portishead con su aclamado “Third”, un LP que dejó claro que eso de las etiquetas no iba con los de Bristol: un poco a trip-hop si que sonaban todavía, pero sobre todo sonaban a ellos mismos con una década más de experiencia musical acumulada que les sentó muy muy bien. Lo de Tricky no hizo más que confirmar lo que todo el mundo intuía: sus tiempos de gloria terminaron a la vez que el siglo XX y no volverán jamás; “Knowle West Boy” fue un episodio más de tricky-batiburrillo que poco tenía que ver con cualquier cosa producida por este señor en los noventa. Así pues, para encontrar ese revival triphopero del que tanto hablaba la prensa tendríamos que irnos al menos mediático de los lanzamientos de la terna anteriormente citada: “Blood, Looms and Blooms”, de Leila.

Pese a moverse más en la esfera de la “electrónica avanzada” (Warp, Rephlex…) que en la del trip-hop, la productora anglo-iraní entregó un disco que daría el pego si te dicen que salió al mercado en 1998 en vez de en 2008, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva.

 

 

 

 

En lo positivo, el hecho de poder escuchar un buen disco de un género semiolvidado e incluso denostado por ese aparato hipster que regula a un ritmo acelerado lo que está in y lo que está out en tendencias musicales. Lo malo: un poco siguiendo esa culto hipster hacia la novedad, lo cierto es que el disco no ofrecía nada nuevo y pasó absolutamente desapercibido en medio del marasmo post-dubstep que se estaba cociendo aquel año, pasando así sin pena ni gloria por la memoria musical de los años 0. Sea este post mi pequeñísimo granito de arena para evitar que caiga en el olvido.